Green Bay Packers y Philadelphia Eagles se enfrentan este viernes en São Paulo, en el primer partido de la temporada regular de la NFL en la historia de Sudamérica, que contará con un refuerzo policial entre las críticas de algunos jugadores por la inseguridad.
La ciudad más poblada de Brasil acogerá este encuentro de la semana 1 de la temporada 2024 de la NFL, que viene ganando popularidad en el país de O Rei Pelé.
Los dos equipos ya están en territorio paulista y este jueves se ejercitarán en lugares diferentes. Los Eagles serán los únicos que reconocerán el estadio del Corinthians, engalanado para la ocasión y donde se colgó el cartel de ‘no hay billetes’ en pocas horas.
Los Packers entrenarán en el campo de entrenamiento del equipo albinegro, uno de los más tradicionales del Campeonato Brasileño.
São Paulo se ha volcado con este evento inédito en la región, en medio del proceso de expansión internacional de la NFL, que en el pasado ha pisado Londres, Toronto, Ciudad de México, Múnich y Frankfurt.
La prensa local le ha dedicado reportajes destacados, las tiendas de ropa deportiva han puesto a la venta los uniformes de ambos equipos y hasta se ha montado un espacio en un parque de la ciudad con actividades y experiencias relacionadas con el fútbol americano.
Sin embargo, algunos jugadores han vertido críticas por tener que jugar en Brasil, uno de los países con peores índices de criminalidad de América del Sur.
Darius Slay, cornerback de los Eagles, confesó recientemente en su podcast que no quería jugar en Brasil.
Esas dudas también las compartieron dos de sus compañeros.
A.J. Brown, uno de los jugadores más destacados de la franquicia, afirmó la semana pasada en rueda de prensa que, antes de viajar, les pasaron una serie de recomendaciones sobre seguridad y que “probablemente” se quedará todo el tiempo en su cuarto de hotel.
“Tuvimos una reunión en la que nos dijeron muchos ‘no hagáis esto’, así que solo quiero ir allí, ganar el partido y volver a casa”, añadió, en línea con su compañero Nick Gates, según ESPN.
Aunque São Paulo es una de las ciudades más seguras del país, sí ha habido episodios de robos cuando, por ejemplo, se ha celebrado el Gran Premio de Fórmula 1 de Brasil, en el circuito de Interlagos.
El siete veces campeón mundial de F1, el británico Lewis Hamilton, ya se quejó en el pasado de que “todos los años” había asaltos en los alrededores del trazado paulista, después de que miembros de su equipo fueran atracados a punta de pistola.
Ese problema pareció resolverse en las últimas ediciones del Gran Premio.
No obstante, esa opinión no es unánime. El quarterbcak de los Eagles, Jalen Hurts, reconoció estar “emocionado” por jugar en Brasil.
Además, el Gobierno de São Paulo anunció un refuerzo policial con batallones especializados para garantizar la seguridad.
En este sentido, las delegaciones de ambos equipos serán escoltadas en todos sus traslados y habrá más policías en los alrededores del estadio, así como “en el transporte público, en los hoteles y en los puntos turísticos y gastronómicos” de la ciudad.
Con información de EFE